Los Hermanos Donnelly, como se ha bautizado en España, es un drama negro cuyo creador, productor ejecutivo, guionista y director de algunos episodios es mi amadísimo Paul Haggis y Robert Moresco. Para el que no lo sepa, la serie se centra en cuatro hermanos que viven en Hell’s Kitchen, el barrio irlandés de Nueva York, con facilidad para meterse en problemas que, por ciertos acontecimientos, acaban enfrentados a la mafia italiana. Todo hay que decirlo, el punto de partida a nivel perfiles de personajes y mafias está repleto de clichés y estereotipos que pueden echar para atrás o hacer a la serie pretenciosa pero, a mí, no me molesta. Para calentar el ambiente y meteros en cuestión iba a poner la excelente y directa cabecera pero, como me es imposible encontrarla, voy con una buena promo.
De primeras, hay que decir que no es una serie NBC. Yo me sorprendí mucho de que la cadena eligiera algo con este perfil tan concreto (y violento) para su primetime y, efectivamente, pronto quedó claro que Los Donnelly no eran carne fácil de digerir por la audiencia de las network. Acabó cancelada tras 8 episodios, y pudimos los 5 últimos gracias a su emisión online.
El piloto es excelente. Uno de los mejores que he visto. Pone todas cartas sobre la mesa, presenta a los personajes de forma clara y efectiva, deja muy claro el tono que tendrá, el nivel de violencia y de humor negro, la dinámica del discurso diegético por parte de un narrador testigo que cuenta los hechos desde su punto de vista, otorgando a la serie un ritmo muy peculiar que aligera los episodios.
El primer gran acierto es la fuerte empatía que se crea con el personaje protagonista, Tommy Donnelly. Ya desde el principio no sólo te preocupa sino que deseas que todo le salga bien. Las tramas del mundo mafia, con sus venganzas, sus esbirros, sus trampas, sus engaños, lo sucio y oscuro proporcionan un universo muy atractivo aunque, realmente, el mayor enemigo de los hermanos son ellos mismos.
Es un título muy atractivo a nivel visual, de personajes y de guión que resulta muy entretenido de ver con un final aceptable a pesar de haber sido cancelada. Su gran fallo llega como consecuencia de su temprano final. Hacia la mitad de la serie, se percibe la intención de sacar nuevas líneas de trama para cada uno de los protagonistas, aunque siempre compartan algo, y se crea un enmarañado que podría haber sido interesante de cara a desarrollarlo con tranquilidad a lo largo de la temporada, pero la noticia de la cancelación supongo que provocó una necesidad inevitable de ir cerrando y reconduciendo las historias hacia un final común y cerrado. Bajo mi punto de vista se hace con mucha maña pero esos episodios se hacen algo más tediosos y caóticos, algo nada positivo al tratarse de una serie con tan pocos capítulos. A pesar de todo, se perdona y se disfruta enormemente.
Por hablar brevemente del tema, el cast es muy acertado y tiene algunas caras conocidas. La chica de la historia es Olivia Wilde, eterna número 13 de House. Nicky Cottero es uno de los italianos que complica la vida a los hermanos y está interpretado por el carismatico Kirk Acevedo, a quien hemos visto como Charlie en Fringe. Otros son Billy Lush (Generation Kill) o Jonathan Tucker (recientemente visto en White Collar).
En definitiva, The Black Donnellys es una buena serie que ha pasado desgraciadamente desapercibida y que gustará, sobretodo, a aquellos que disfruten del género. Si buscáis un título entretenido, de calidad, rápido de ver y barato (11 euros en Media Markt) poned a los Donnelly en vuestra vida.